Es esta una receta habitual en la mitad norte de España y que demuestra lo que se puede conseguir en la cocina con unos sencillos ingredientes.
Se pueden utilizar como primer plato, como plato único acompañado por una ensalada o como guarnición.
La de hoy, es la forma más sencilla de prepararlas.
INGREDIENTES
- Un Kg. de patatas.
- Una cebolla.
- 3 dientes de ajo.
- Una pastilla de caldo de carne.
- 3 huevos.
- Harina.
- Vino blanco.
- Perejil.
- Colorante alimentario.
- Sal y pimienta
ELABORACIÓN
- Pelamos las patatas y las cortamos en lonchas de medio cm. desechando las puntas. Las salpimentamos y pasamos por harina y huevo batido y las freímos hasta que se empiecen a tostar. Pasamos a una fuente con papel de cocina que absorba el exceso de aceite, Reservamos.
- Picamos el ajo y la cebolla, rehogamos y cuando comience a tomar color, añadimos el perejil picado y un vaso de vino blanco. Dejamos que evapore el alcohol.
- Agregamos un litro de agua, la pastilla de caldo concentrado y el colorante alimenticio. Damos un hervor y vamos colocando las patatas que habíamos preparado con cuidado, una a una. el liquido, debe cubrir las patatas, si es necesario añadir agua.
- Dejamos cocinar a fuego suave cuarenta y cinco minutos,
- Al final la salsa engorda. Si la quisieramos mas espesa, corregimos con un poco de maizena o aplastando una de las patatas.
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