Agosto y Setiembre, son meses de higos. El que tiene una higuera, o un amigo que la tenga (JR), suele tener garantizado el suministro, ya que las cosechas son abundantes.
Al final, nos hartamos de comerlos como fruta, de hacer mermelada o de ponerlos a secar.
Pocas veces se nos ocurre incluirlos en una ensalada en la que su sabor y textura complementen a otros ingredientes.
INGREDIENTES
- Una bolsa de brotes de rúcula, canónigos y espinacas.
- 6 higos frescos.
- Una bola de queso mozarella
- 3 tomates Kumato.
- 3 lonchas de jamón serrano.
- Medio limón.
- 2 cucharadas de miel.
- 3 cucharadas de Aceite de oliva virgen extra.
- Albahaca fresca.
- sal y pimienta.
ELABORACIÓN
- Pelar los higos y partirlos en cuartos. Reservar.
- Lavar y cortar los tomates en gajos finos. Reservar.
- Cortar en trozos no muy grandes el queso. Reservar.
- Cortar el jamón con unas tijeras. Reservar.
- Preparar una vinagreta con el zumo del medio limón, las dos cucharadas de miel, el aceite y la albahaca. Salpimentar y agitar hasta que emulsione. Reservar.
- Disponer en una fuente el tomate en el centro, rodearlo con los brotes y con los cuartos de higos. Colocar el queso y el jamón.
- Distribuir la vinagreta por encima o presentarla a parte en una salsera.
Que buena pinta tiene!!
ResponderEliminarGracias Maria Teresa por tu comentario (y por hacerte seguidora).
ResponderEliminarHay veces en que la vista trabaja por delante.
Como ves la ensalada (como casi todas) es sencillísima de realizar pero resulta muy efectista (y sabrosa).
Además hemos aprovechado unos excelentes higos.
Un saludo.